- Área: 200 m²
- Año: 2015
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Fotografías:Santiago Escribano Martínez
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El actual monasterio de San Juan es parte de un conjunto de edificaciones que surgen en el siglo XI entorno a un monasterio benedictino situado extramuros en la ciudad de Burgos. Lugar de paso de peregrinos del Camino de Santiago en su acceso a Burgos por el arco de San Juan.
El proyecto de cubierta para la ruina de la iglesia del Monasterio de San Juan, pretende proteger los restos arquitectónicos de la iglesia y, al tiempo, crear un nuevo espacio a resguardo de las inclemencias del tiempo en el que poder celebrar actividades culturales con independencia de las condiciones meteorológicas.
La nueva cubierta se materializa en un gran plano plegado que evoca y nos traslada desde su esencia a esa tipología eclesiástica de tres naves que originalmente existieron. A este plano plegado se le suman otros dos planos horizontales que cubren la zona del ábside y la zona noroeste. Todo este conjunto de planos, con una visión contemporánea y desde el respeto a los restos de la iglesia, pretende “flotar” por encima de la ruina como una estructura independiente dejando la percepción de los restos arquitectónicos inalterables.
El respeto a lo existente de esta propuesta se materializa también desde el punto de vista constructivo. Los planos que conforman la cubierta se prolongan más allá de los límites de la ruina, por encima de las coronaciones de los muros, con el objeto de garantizar la protección de los restos arquitectónicos.Con el objetivo de afectar en la menor medida posible el sustrato arqueológico se ha limitado al mínimo los apoyos mediante pilares situados en la parte central. Al prescindir, casi en su totalidad, de soportes en el interior de la iglesia se consigue una lectura más limpia y clara de lo que queda de monumento pues prácticamente no existen elementos que pudieran tapar u ocultar detalles de pilastras o portadas.
El acabado del conjunto de planos de cubierta es en todos los casos el mismo aunque adopta distintos criterios según se trate del interior o el exterior. Se trata de una estructura de perfiles de acero laminado que siempre queda oculta al revestirse por el exterior en vidrio laminado con un acabado translucido mate y al interior con un falso techo de lamas de madera. Tanto el vidrio traslúcido como la celosía de madera tamizan la entrada de luz al interior del espacio provocando un interesante efecto escenográfico adecuado para el espacio monumental que se cubre. La madera del acabado interior de la cubierta sirve como elemento de transición entre el carácter marcado de ruina de la iglesia y la contemporaneidad de las líneas rectas y cerramientos de vidrio de la cubierta propuesta.
La iluminación juega un papel clave en la intervención. Interiormente el filtrado de la luz natural a través de la cubierta acentúa el carácter ambiguo cubierto-descubierto del planteamiento y pone en valor el carácter de la ruina. De noche sin embargo, una cuidada iluminación puntual de los restos arquitectónicos y una iluminación general proyectada de forma indirecta sobre la madera aportan al conjunto una sugerente puesta en valor del espacio de forma más recogida. Al exterior el plano plegado de vidrio traslúcido, iluminado desde el interior actuará de noche como farol que delata la intensa actividad cultural interior.
Con esta nueva cubierta para la iglesia del Monasterio de San Juan además de garantizar la consolidación y protección de los restos arquitectónicos, la ciudad de Burgos dispondrá de un nuevo espaciopolivalente y de intercambio cultural de alrededor de 1.300m² para la organización de diferentes actividades.